LA POBREZA: EL GRAN RETO

No cabe la menor duda de que la pobreza es el principal problema que tenemos en el planeta.

Previo a la pandemia, los datos ya eran alarmantes: cada día, 1.100 millones de personas en el planeta no comían absolutamente nada; 1.000 millones no contaban con agua potable, y 3.500 millones no tenían un servicio adecuado de saneamiento.

1.800 millones de personas (casi la cuarta parte de los habitantes del mundo) vivían en barrios marginales y asentamientos informales, viviendas inadecuadas o sin hogar.

Toda esta situación seguramente se ha complicado con la pandemia por Covid – 19, pues se han perdido muchos empleos (según la ONU, hasta junio del 2020 se habían pedido 400 millones de empleos en el mundo). El problema es que la humanidad hoy está centrada en resolver el tema de salud, pero la brecha con los más pobres cada día es mayor.

Previo a esta pandemia, el 1% de la población del mundo contaba con el 85% de la riqueza. En el caso de México y según un informe de OXFAM, los seis mexicanos más ricos acumulaban 8 veces más riqueza que el conjunto de 62 millones de los más pobres de México.

Según un informe del Banco Mundial “la desigualdad se ha convertido en el principal escollo para cumplir el objetivo de eliminar la pobreza extrema en 2030, por lo que se plantean seis fórmulas concretas y probadas para ello… para poner fin a la pobreza, debemos lograr que el crecimiento beneficie a los más pobres, y una de las medidas más eficaces en ese sentido es reducir el elevado nivel de desigualdad, en particular en los países donde residen muchas personas pobres".

Las seis estrategias que se proponen para tal fin, son:

Desarrollo y nutrición para la primera infancia.

Cobertura universal de salud

Acceso universal a la educación de calidad

Transferencias Monetarias a las Familias Pobres: Estos programas proporcionan un ingreso básico a las familias pobres, que les permite enviar a sus hijos a la escuela y brinda a las madres la posibilidad de acceder a servicios básicos de atención de la salud. Asimismo, las familias pueden utilizarlos para comprar semillas, fertilizantes o ganado y para afrontar las sequías, inundaciones, pandemias, crisis económicas u otras perturbaciones potencialmente devastadoras. Se ha comprobado que reducen considerablemente la pobreza y crean oportunidades tanto para los padres como para los niños.

Infraestructura rural, en particular caminos y electrificación

Tributación progresiva: Los impuestos progresivos equitativos permiten financiar las políticas y los programas estatales que son necesarios para equiparar las condiciones y transferir recursos a los habitantes más pobres. Asimismo, se pueden diseñar sistemas tributarios que permitan reducir la desigualdad y al mismo tiempo mantener el coste de eficiencia en un nivel bajo.

 

Al final, lo que se requiere para acabar con la pobreza es la voluntad de querer hacerlo, pues hasta ahora simplemente se hacen pequeñas acciones que no impactan masivamente.

Nuestro México es un ejemplo de ello, pues mientras no decidamos disminuir las desigualdades, no sólo no tendremos menos pobres, tendremos más personas que se convierten en presa fácil de la delincuencia creciente.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares