ACABANDO CON EL CONGELADOR DEL MUNDO

Hace un par de años tuve la fortuna de ser invitado como conferencista a la universidad de Nuuk en Groenlandia conocida localmente como Llisimatusarfik, en la cual pudimos hablar sobre educación y paz, presentando los resultados de un proyecto realizado con investigadores de la Universidad de Copenhague y de nuestra Universidad Cuauhtémoc de Aguascalientes.

Mi estancia en Dinamarca y Groenlandia fue maravillosa, pues en ambos lugares pude trabajar no sólo con maestros universitarios, sino también con los actores de la educación básica.

Al llegar a Groenlandia me quedé sorprendido de la belleza de un lugar que solo había visto en películas y documentales; la experiencia de descender del avión a menos 27 grados fue impactante, pues nunca había vivido un clima tan extremo.

Mi hijo Daniel que recién cumplía sus 13 años, fue el compañero de una experiencia maravillosa donde conocimos investigadores, pensadores y defensores del plantea. Cada noche se convertía en un espectáculo maravilloso el poder disfrutar de las auroras boreales, una exhibición deslumbrante de las maravillas de nuestro planeta.

Luego de conocer con más detenimiento el lugar y platicar con los inuit (malamente llamados esquimales) pude ver con tristeza el daño terrible que le hemos hecho a la tierra. En un afán por tener y dominar la naturaleza, hemos llevado al límite a nuestro planeta y esto lo puedes constatar con mucha tristeza cuando llegar a Groenlandia.

Todos los habitantes hablaban de terribles olas de calor de más de 20 grados (completamente inusual para esta parte del planeta) que han hecho que se esté dando un deshielo masivo que pone en riesgo al planeta entero. Según investigadores de Polar Portal, el casquete glaciar el vasto territorio ártico se ha derretido unos 8.000 millones de toneladas cada día.

Según datos de este portal, el inmenso volumen de agua fundido a diario en los últimos días de julio de 2021 (8 billones de litros de agua dulce) “bastaría para cubrir con 5 centímetros de agua toda la superficie de Florida”.

Según investigadores europeos, el derretimiento de la capa de hielo de Groenlandia contribuirá a la subida general del nivel del mar en 10 a 18 centímetros de aquí a 2100, es decir 60% más rápido que la estimación anterior. El casquete de hielo de Groenlandia contiene lo suficiente para hacer subir los océanos de 6 a 7 metros.

Hablando en Nuuk con varios investigadores que han dejado su vida al cuidado del planeta comentaban que estamos al borde de destruir lo que ellos denominan como “el congelador del mundo”, pues a nadie parece importarle lo suficiente este tema que seguramente nos llevará al colapso en las próximas generaciones.

En un afán por poseer recursos y dominar la riqueza material, hemos aceptado destruir cada día un poco más al único planeta que hoy tenemos para vivir, lo que seguramente pasará factura en las siguientes generaciones.

Mi pregunta obligada fue: ¿Existe alguna solución? Y con cierto escepticismo la respuesta fue contundente: -Claro que existe, el problema es que los cambios serían tan radicales que los países no estarían dispuestos a hacerlos-

Mi experiencia en Nuuk fue maravillosa, pues encontré una cultura bien diferente a la nuestra. Desde mi experiencia en Nuuk, en cada conferencia o plática que tengo, trato de hablar con los jóvenes y adultos sobre el tema y así aportar un granito de arena sobre un tema que vemos lejos y que lastimosamente no entendemos o no queremos aceptar.

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